Cuando piensas en Tommy Hilfiger, es probable que visualices su icónico logotipo en rojo, blanco y azul o su estilo clásico que ha dominado la moda desde los años 80. Sin embargo, lo que muchos no saben es que Hilfiger tuvo dificultades en el colegio debido a la dislexia, un reto que enfrentó desde muy joven.
"Me costaba mucho leer, y me sentía como uno de los chicos tontos," ha mencionado Hilfiger en diversas entrevistas. En las aulas, sus dificultades de aprendizaje lo dejaron marginado. Mientras sus compañeros se enfocaban en los libros, Hilfiger desarrolló una visión creativa que cambiaría la industria de la moda para siempre .
Un rebelde que no siguió las reglas
Dejar la escuela no fue una decisión fácil, pero Hilfiger sabía que el sistema educativo tradicional no era para él. En lugar de seguir un camino convencional, decidió perseguir lo que realmente le apasionaba: la moda. A los 17 años, compró 20 pares de jeans en Nueva York, los llevó a su ciudad natal, Elmira, y comenzó a venderlos desde el maletero de su coche. Así comenzó su imperio. Con las ganancias, abrió su primera tienda, marcando el inicio de la marca que hoy conocemos.
Lo que distinguió a Hilfiger de otros diseñadores fue su capacidad para simplificar. Mientras otros seguían las tendencias, él creó piezas prácticas y accesibles, pero con su característico toque de estilo. "La dislexia me permitió ver el mundo de otra manera", afirma Hilfiger. Esa forma visual de pensar fue clave para su éxito.
La dislexia como superpoder
Aunque su dislexia no fue diagnosticada hasta más tarde en la vida, Hilfiger siempre supo que tenía una forma diferente de aprender. Al igual que otros disléxicos exitosos, encontró su camino fuera de los métodos tradicionales. No poder leer largas instrucciones o teorías lo llevó a adoptar un enfoque más práctico y visual. En lugar de leer, aprendió haciendo y experimentando.
La dislexia, que inicialmente lo hizo sentirse diferente, se convirtió en su mayor fortaleza. Le permitió diseñar con una perspectiva innovadora, simplificando procesos complicados y creando una marca que conecta con personas de todos los estilos. "Siempre me enfoqué en lo simple, en lo limpio, y creo que eso me permitió conectar con el público", ha señalado Hilfiger.
Un mensaje de inspiración para los jóvenes con dislexia
Hoy en día, Tommy Hilfiger es reconocido no solo por su éxito en la moda, sino también por ser un defensor activo de la dislexia. Utiliza su plataforma para inspirar a los jóvenes que enfrentan dificultades similares a las que él vivió. "Si tienes dislexia, no estás solo," afirma Hilfiger, animando a los niños a abrazar sus diferencias y verlas como fortalezas. "La dislexia no me frenó, me impulsó".